1. De Juan Cejudo de Cádiz.
7-11-2005
Indudablemente,el
tema candente de actualidad hoy a nivel eclesial( pero también
político) es la postura de la Conferencia Episcopal Española por su
activa contribución a la confrokntación política y sin duda,
arrimando el hombro al principal partido de la oposición(P.P)
porque sigue en la misma senda que él : desgaste de un Gobierno que
no les gusta ni a unos ni a otros.
La
llamada a la movilización que los obispos han hecho para que los
católicos se echen a la calle para protestar contra el Gobierno no
es nueva. Ya lo hicieron anteriormente cuando protestaron contra la
ley que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Prácticamente ,
desde que salió elegido el nuevo Gobierno, los obispos españoles no
han hecho más que intentar desgastarlo y si pudieran, quitarlo, para
que entre de nuevo su Gobierno amigo : el Gobierno de la derecha que
pueda defender mejor sus intereses y sus privilegios.
Nuestros obispos no alentaron a la manifestación a los católicos
para protestar contra la guerra de Irak. La Conferencia Episcopal no
se pronunció oficialmente en contra del Gobierno del
P.P por apoyar aquella guerra injusta
que se hizo contra la ONU y contra todo el mundo excepto los señores
Bush, Blair
y Aznar;una guerra que ocasionó y sigue
ocasionando miles y miles de muertos y ha destruido a un país.
Nuestros obispos no alientan a los católicos a echarse a la calle
para protestar en la Campaña POBREZA 0 contra el hambre en el
Mundo.No.
Tampoco lo hacen para protestar por la muerte de miles de
inmigrantes por intentar cruzar las fronteras, sea asaltando las
vayas de Ceuta y Melilla, cruzando en pateras el Estrecho o las
aguas canarias, ni alientan a los católicos a que protesten por el
injusto sistema económico internacional que ocasiona la muerte, la
hambruna, las guerras , las calamidades y
la miseria en muchísimos países del Tercer Mundo, especialmente en
el Continente africano.
No.
A nuestros obispos sólo parece preocuparles los problemas
relacionados con el sexo, las clases de religión, su financiación y
el cumplimiento del Concordato que le da importantes prestaciones,
aunque algunas puedan ser inconstitucionales.
Y
del problema de la COPE ¿qué decir? Que se nos cae la cara de
vergüenza ver cómo desde la cadena de los Obispos españoles se
insulta, se agrede, se miente, con unos
responsables de programa como el Sr. Jiménez
Losantos que, según uno de los asistentes a sus tertulias,
dijo que “les había hecho vomitar”.
Bueno, pues los obispos consienten todo esto. ¿Por qué? Dicen los
entendidos que este tipo de programas consigue subir la audiencia y
por tanto, los ingresos por publicidad. Es decir que los obispos
prefieren sanear sus negocios en la COPE, antes que transmitir, a
través de ella un estilo periodístico que refleje de alguna manera
el talante del Evangelio de tolerancia, respeto, estilo para saber
decir las cosas, aunque los ingresos no sean tan altos. Pueden
seguir manteniendo, si así lo consideran,una
postura crítica contra el Gobierno. Pueden seguir discrepando. Pero
de otro modo, con otro estilo.
Las formas de ahora son absolutamente intolerables. Hasta el punto
que los obispos catalanes una y otra vez han declarado que quieren
mediar para que estos excesos se terminen, pero han dicho que se
sienten impotentes y que no pueden conseguir nada.
Sabemos que otros obispos también opinan lo mismo.: que no les
gustan los excesos de la Cadena ni el estilo de ese presentador
impresentable .
No
es el caso de Monseñor Amigo que está muy de acuerdo con la COPE, la
escucha y la alaba. Creo que ya va siendo hora de quitar la careta
a este obispo y dejarle al descubierto tal como
es : un arzobispo de derechas. Que
anunció que él sí que asistiría a la manifestación de la derecha del
día 12 y que ahora alaba a esa COPE reaccionaria que millones de
españoles repudiamos.¿Será que busca
subir más en el escalafón clerical y aspira a un puesto en el
Vaticano?
Todo esto no hace más que crispar los ánimos entre los creyentes y
no creyentes y aumentar la división entre unos y otros.
Unos obispos que lo que deben de hacer es unir, aglutinar a unos y
otros, saber estar para todos, para los que votan
P.P y los que votan PSOE,
I.U o los partidos nacionalistas. Y
deben saber que hoy somos mucho más los que votamos izquierda que a
la derecha. Y que, por lógica, muchísimos de esos votantes de
izquierda somos creyentes. Debieran tenerlo siempre muy presente.
Si
los obispos mantienen posiciones políticas que en la práctica se
identifican con los de un solo partido, no cabe duda que millones de
votantes de otros partidos se sentirán no acogidos, ni valorados, ni
comprendidos. Y no creo que eso sea señal de que son buenos
“pastores”. Un buen pastor debe serlo para todos. No sólo para
algunos.
Y
eso es lo más grave que está sucediendo. Están consiguiendo el
rechazo cada vez mayor de miles y miles de personas, llegando en
algunos casos incluso a la apostasía de cientos de personas que ya
no quieren para nada ser contados en el número de los que figuran
como “católicos” por la partida de bautismo que en su día
recibieron.
Se
echa de menos aquella época de Tarancón
que supo realmente influir para que los obispos jugaran un papel
digno en la etapa de la transición, sin meterse en política
partidista y sabiendo estar para unos y para otros.
Lo
de ahora es verdaderamente lamentable y esta teniendo ya
consecuencias muy dolorosas.
Debiéramos tener otro tipo de obispos, con más visión, más
inteligentes, más dialogantes con todas las tendencias, menos
partidistas en política.
2. De Secretaría de un colegio
privado. 11-11-2005
Me
da vergüenza escuchar las "tonterías" que dicen los obispos y la
cope y otros medios de comunicación, que últimamente se han puesto
descaradamente a defender los argumentos sin sentido del PP en su
lucha contra el gobierno.
Me
da igualmente vergüenza las "tonterías" que dicen los políticos del
gobierno y los medios de comunicación puestos a su servicio.
Los
problemas de la educación de hoy no son ni mucho menos los que
provocan discusión.
Unos y otros nos echan arena en los ojos para que no veamos con
claridad la realidad de nuestro sistema educativo y las políticas
interesadas que todos los gobiernos hacen con la educación.
En
mi calendario dice que estamos en 2005. No estamos ni en tiempos de
la República, ni viviendo el Franquismo y nuestros políticos parecen
vivir anclados en el pasado. Las políticas agresivas con los que
piensan diferente están de sobra.
Unos quieren liarla y los otros quieren que la lien. Los líderes de
PSOE y PP deberían ponerse de acuerdo en dimitir y salvar el poco de
vergüenza que les queda.
3.
De Marian. Abogada y catequista de adultos. Cádiz. 11-11-2005
Estas cosas me ponen muy triste. Veo demasiados intereses
"subterráneos" en la jerarquía, aunque siempre tengan unas bellas
palabras. Ya no me fío de ninguno, y de este papa, menos y de su
supuesta elección por el Espíritu, menos todavía. Han conseguido,
pese a mi resistencia, que vaya por libre en mi fe. ¿Nos podremos
quitar de encima alguna vez los cristianos de a pié, esta mole
jerárquica que nos ahoga, nos ata y hasta nos escandaliza?
¿Volveremos alguna vez a ser, como relatan los Hechos, pequeñas
comunidades, de vida y de fe, donde cada miembro participe según sus
carismas? Yo no lo veré, y por eso me gusta Atrio; porque se empieza
a caminar. Saludos, Marian