RD/Agencias
Lunes, 23 de mayo 2005
Con motivo de los actos preparados para la
conmemoración del 150 aniversario de la proclamación del dogma de la
Inmaculada Concepción y del Primer Centenario de la Coronación de
la Virgen del Pilar, el cardenal arzobispo de Madrid, monseñor Antonio María
Rouco Varela, ofreció una catequesis a los fieles de la archidiócesis de
Madrid, congregados en una abarrotada Iglesia de Santiago el Mayor, en la
capital aragonesa.
La idea fundamental de su exposición fue, según informa la agencia
Veritas, fue la del significado de la Consagración personal y
comunitario al la Virgen María. Se refirió al valor de esta práctica en el
siglo XX y recordó los momentos recientes de nuestra historia en la que
España se consagró al Inmaculado Corazón de María. “España
será cristiana y católica o dejará de existir como tal”, afirmó.
Según el cardenal Rouco Varela, si España pierde sus raíces
“no sólo dejará de ser cristiana católica, sino que dejará de
ser España”.
El arzobispo de Madrid señaló que “muchos apuestan por una España no
católica, pero en el fondo el alma de España vibra a través de la
historia de su conciencia, de su cultura, de todas las épocas gloriosas de
su Historia” y puntualiza que en todas esas épocas “ha habido fidelidad de
fondo a Cristo, a la búsqueda del Señor”.
En la catequesis, celebrada antes de la Misa Estacional que
concluyó la Peregrinación, el cardenal Rouco se refirió a la renovación por
parte de los obispos de la consagración de los españoles al Inmaculado
Corazón de María, manifestando que “la consagración que vamos a realizar en
la Plaza del Pilar debería recordar las raíces cristianas y católicas de
nuestra vida, de nuestro pueblo y de nuestra historia, en el lugar donde la
Virgen acompaño a la primera evangelización de España”.