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LA CAMPAÑA DE ATRIO                                              15-05-2005

 

Joaquín Perea

Presidente del Consejo de Dirección de IGLESIA VIVA

ATRIO, 15-05-2005

Querido Antonio:

Me ha sorprendido leer en algún medio de comunicación que "un colectivo de católicos agrupados en torno a la revista Iglesia Viva y el portal en Internet de información religiosa Atrio han iniciado la recogida de firmas en torno a un documento contra la nota del Comité Ejecutivo de los obispos españoles oponiéndose al matrimonio homosexual". Aunque sé que tu no has sido causante directo de la noticia, creo que es mi deber como presidente del Consejo de Dirección dirigirte estas breves líneas con objeto de que aquella se rectifique en lo posible.

Sabes muy bien que "Iglesia Viva" no ha tomado ninguna posición respecto a la citada nota del Comité ejecutivo del episcopado. El tema del matrimonio entre homosexuales no ha sido materia de nuestra reflexión y la revista no ha lanzado ni interviene en el debate suscitado. Los criterios de la revista se hacen manifiestos en la propia publicación a través de las declaraciones del consejo de dirección, como ha sucedido, por ejemplo, en el último número en relación con "La construcción de una sociedad laica". Es obvio que cada uno de nosotros participa o interviene en diversos foros, donde puede mantener libremente la opinión que estime correcta en ese como en otros puntos, pero no en cuanto miembro de la revista. Sería oportuno que una distinción tan sencilla como esta quedara clara.

Por ello te ruego amistosamente que tomes las medidas que estimes oportunas para hacer público que la revista "Iglesia Viva" se distancia de la posición a la que ha sido vinculada y que no tiene ninguna participación en la campaña de recogida de firmas.

 Quiero terminar manifestándote mi valoración positiva y mi aprecio por el esfuerzo que estás realizando a través de ATRIO; no resulta fácil mantener la libertad de los hijos de Dios en la presente coyuntura eclesial. Un fuerte abrazo.

 Joaquín Perea

 

NOTA DEL COORDINADOR DE ATRIO:

Soy el primero en lamentar que alguien haya interpretado y publicado que IGLESIA VIVA estaba vinculada a ATRIO y en concreto a esta campaña. Es verdad que desde hace treinta y cinco años participo en la redacción y otras tareas de IGLESIA VIVA, a quien debo tanto en la elaboración de un pensamiento cristiano fiel al Evangelio y a la realidad. Pero nunca he querido comprometer a la revista en este portal que se inició y se modera en total independencia de la revista. Para mantenerles más al margen y porque el tempus de un portal así es incompatible con una revista de pensamiento, ni siquiera comuniqué esta iniciativacon anterioridad a los Consejos de IGLESIA VIVA y de FRONTERA, revistas que ATRIO no se cansará de recomendar. Del inicio de esta campaña son exclusivamente responsables el grupo ¡AU! de Valencia, en cuyo seno surgió la idea, y ATRIO, que la asumió como propia y la desarrolló. Iglesia Viva sólo expresa su posición a través de la revista que edita y más expresamente  de los escritos editoriales que firma colectivamente según las normas internas del grupo.

Efectivamente el último posicionamiento oficial sobre la situación de Iglesia Española lo hizo IGLESIA VIVA en un documento publicado en el mes de enero pasado con el título La construcción de una sociedad laica. En él, situado en un razonamiento muy elaborado en ocho densas páginas, se dice lo siguiente:

 "Determinadas afirmaciones episcopales acerca de la personalidad, la psicología y la génesis de la homosexualidad, no sólo son impropias de la misión episcopal, sino que no respetan mínimamente el estatuto de la ciencia, que ha de atenerse al proceso de verificación y falsación. No es de recibo que el Presidente de la Conferencia Episcopal, como tal obispo presidente, diga claramente cómo debe regular el Gobierno el matrimonio de los homosexuales, incluso en sus detalles más técnicos, a saber, en el marco de una ley general de convivencia en grupo y nunca mediante una ley específica para ese tipo de parejas. ¿Es ésta una doctrina que se deduce del mensaje evangélico y que ha de proponer un sucesor de los apóstoles?" (Iglesia Viva, nº 221, págs. 1-73 a 1-80)

Esta sí que es una afirmación de IGLESIA VIVA y bien clara también, no muy distinta de lo que expresa nuestro conciso y tajante documento.

Antonio Duato.

 

 

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